Bajorrelieve Rapto de Persefone. 58 x 23 cm.

Descripción

Bajorrelieve «Rapto de Perséfone».  Reproducción de relieve realizado en mármol moldeado (polvo de mármol aglutinado con resina). Terminación de envejecimiento realizada con pátinas a base de tierras naturales que le dan la textura y la apariencia de una escultura antigua embellecida por el paso del tiempo.

• Medidas totales: Altura: 23 cm. Ancho: 58 cm. Fondo: 3 cm.
• Peso aprox.: 3 kg.

Reproducciones de esculturas y relieves, inspiradas en piezas originales de museos. Arte clásico. Hecho a mano en España. Ideal para decoración de interior (salones, vestíbulos, bibliotecas y despachos). Pieza apta para colocar en exteriores, terrazas y jardines, resistente a las inclemencias del tiempo.

Bajorrelieve «Rapto de Perséfone». Relieve con la escena del secuestro de Perséfone por el dios Hades. El mito de Démeter y Perséfone es parte integral de la mitología griega y narra la conmovedora historia del descenso a los infiernos de la diosa Deméter en busca de su hija, dando origen a las estaciones del año siguiendo una de las claves de interpretación de este mito.

Démeter, diosa de la agricultura, vivía felizmente con su hija Perséfone hasta que Hades, dios del inframundo, la secuestra. Entonces la diosa de los cultivos, sumida en la tristeza, desciende al Hades, y al desaparecer de la superficie de la tierra provoca la inactividad en la naturaleza propia del invierno. Desesperada por recuperar a Perséfone, Démeter se presenta ante su hermano Hades en el inframundo, y la esterilidad de la naturaleza que su desaparición ha provocado, lleva a Zeus a intervenir, acordando un compromiso: Perséfone pasaría la mitad del año en el reino del Más Allá y el resto en la superficie.

En una de sus claves este mito simboliza los ciclos de la naturaleza de adormecimiento y de regeneración, representando la reunión alegre de madre e hija en cada primavera, y su separación dolorosa anunciada por la caída de las hojas del otoño. En otra clave simbólica se interpreta como una metáfora del ciclo de la vida y la muerte, donde Perséfone simboliza la resurrección y renovación constante. Este relato mítico nos recuerda la conexión profunda entre la madre tierra y sus ciclos eternos.